Clausura Diocesana de la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones en Iztapalapa

Por: Iliana López

Con una Hora Santa seguida de la celebración eucarística, la Diócesis de Iztapalapa clausuró este 8 de mayo la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones, consolidando un espacio de profunda comunión y compromiso con el llamado de Dios.

La jornada comenzó en punto de las 18:00 horas, cuando fieles de distintas comunidades se reunieron para adorar al Santísimo Sacramento. En un clima de recogimiento, la Hora Santa ofreció un momento privilegiado para renovar el ardor vocacional y fortalecer el encuentro personal con Cristo.

Posteriormente, se celebró la Santa Misa, presidida por el Pbro. Adrián Fernández, encargado diocesano de la Pastoral Vocacional. En su homilía, el sacerdote invitó a los asistentes a dejarse conducir por el Espíritu Santo, siguiendo el ejemplo de San Felipe, y a vivir con alegría y autenticidad el servicio pastoral.

“El promotor vocacional debe ser un testigo alegre, que viva ya desde ahora la alegría del cielo, porque sirve con amor”, afirmó el Pbro. Adrián.

Antes de concluir la celebración, el sacerdote animó a los presentes a participar con entusiasmo en el encuentro mariano que se llevará a cabo este viernes en la Basílica de Guadalupe, durante la Peregrinación de la Esperanza, encomendando a la Santísima Virgen María el fruto vocacional de la diócesis.

La clausura dejó un eco de esperanza en la Iglesia local, recordando que la vocación es un don que florece en la oración, el testimonio de vida y la comunidad.