Cielo Abierto celebra 15 años de misión con un concierto en el Auditorio Nacional
- Diócesis de Iztapalapa

- 23 sept
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Por: Esli Marihan Bahena Rivas.
El 20 y 21 de septiembre de 2024 se vivió en el Auditorio Nacional un ambiente de adoración y encuentro con Dios durante el concierto organizado por el ministerio de música católica Cielo Abierto, que celebró 15 años de servicio evangelizador.

El evento, que reunió a más de 10 mil fieles, invitó a los asistentes a acercarse a los sacramentos de la Reconciliación y la Comunión, reconociendo que Jesús está vivo y presente.
Una Iglesia en tiempos de confusión
La celebración contó con la presencia de Monseñor Carlos Samaniego López, quien reflexionó sobre la situación actual de la Iglesia en el mundo.

“Vivimos en un tiempo de caos, oscuridad y confusión, pero el Espíritu de Dios quiere poner orden donde hay desorden, ser luz donde hay tinieblas y guiarnos en la flaqueza”, señaló.
Mons. Samaniego exhortó a los presentes a guardar silencio interior para permitir que el Espíritu hable al corazón a través del canto, la alabanza y el testimonio de los artistas.
Voces que inspiran fe y esperanza
Durante la noche, los integrantes de Cielo Abierto —Itala, Juanjo, Carlos Omar, Ana Bolívar, Paola Pablo, Pedro y Cristal— compartieron reflexiones sobre la fe, la esperanza y el amor de Dios.
Ana Bolívar subrayó la importancia de confiar en el Señor en medio de la ansiedad y la incertidumbre: “No es el cómo, sino el quién. Confiar en Dios es tener paz y esperanza en medio de los futuros inciertos”.
Itala recordó que Dios actúa a través de las personas que nos rodean: “Muchas veces no vemos la esperanza, pero Él nos pone a los hermanos como signo de su presencia”.
Paola destacó que cada persona tiene un lugar en el plan de Dios: “Él no se equivoca al llamarte, confía en ti y te da una misión especial”.
Hora Santa: un encuentro personal con Jesús
Uno de los momentos más significativos de la velada fue la Hora Santa, en la que los asistentes se recogieron en silencio ante Jesús Eucaristía.

Fue un espacio de intimidad espiritual, donde muchos fieles experimentaron consuelo, fortaleza en la fe y un encuentro personal con Cristo.
Un espacio vocacional
El concierto incluyó además un área vocacional con más de 35 stands y cuatro espacios organizados directamente por Cielo Abierto, que presentaron diferentes opciones de vida y misión dentro de la Iglesia.

Una noche de fe y música
El evento, acompañado por la participación del Pbro. César A. Pluchinotta y de los integrantes de Cielo Abierto, se convirtió en un festejo de fe, música y misión evangelizadora que reafirmó la presencia de Cristo en medio de la vida cotidiana de los fieles.





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