Toma de posesión del Pbro. Martín Nava Bello en la Parroquia de Jesús Maestro
- Diócesis de Iztapalapa
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Por: Lizeth Álvarez.
El 1 de septiembre se llevó a cabo la toma de posesión del Pbro. Martín Nava Bello como nuevo párroco de la Parroquia Jesús Maestro, perteneciente al Primer Decanato de la Diócesis de Iztapalapa. El templo se ubica en Rtno. 103 de Ote. 160, colonia Modelo, en la demarcación de Iztapalapa.
La celebración eucarística fue presidida por Mons. Jorge Cuapio Bautista, Obispo de Iztapalapa, acompañado por el Canciller diocesano, Pbro. Daniel Cordero Morales, y el Pbro. Tomás Antonio Rodríguez, párroco saliente.
Durante el rito, el Canciller leyó la carta de nombramiento con la que oficialmente el Pbro. Nava Bello asumió el encargo pastoral de la comunidad.
En su homilía, Mons. Cuapio subrayó cinco ejes centrales:
La importancia de comprender la misión y asumirla como un encargo divino.
El ejemplo de Cristo, quien vivió su misión con la fuerza del Espíritu Santo, mostrando que los dones de Dios son guía en el ministerio.
La necesidad de reconocer las debilidades humanas y pedir al Señor la sabiduría que fortalece en el camino pastoral.
Una reflexión sobre el gesto de Benedicto XVI al renunciar al Pontificado, destacando cómo se pasa del magisterio al ministerio, y aplicando esta enseñanza a la nueva etapa del Pbro. Rodríguez.
Un mensaje de gratitud hacia el sacerdote saliente: “Padre Tomás, usted recogerá los frutos que ha dejado en esta comunidad. Que el Espíritu Santo lo acompañe y esta nueva etapa sea llena de bendiciones”.
Por su parte, el Pbro. Tomás Antonio Rodríguez, tras ocho años de servicio en la parroquia, se despidió con un mensaje de agradecimiento a Dios, a la Virgen María y a la comunidad:
“Dios nos ha venido a decir que nos ama. Que el Señor les bendiga, les proteja y les conceda su gracia para que vivan en paz”.
La comunidad expresó su reconocimiento al Pbro. Rodríguez por su entrega y cercanía pastoral, al tiempo que dio una cálida bienvenida al Pbro. Nava Bello, manifestando esperanza en la nueva etapa que inicia.
El encuentro concluyó con una cena fraterna en la que participaron fieles, sacerdotes y el Obispo diocesano.
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