Toma de Posesión del Pbro. Mario Membrillo en la Parroquia de la Purísima Concepción en la colonia Santa María Aztahuacán
- Diócesis de Iztapalapa

- 22 sept
- 3 Min. de lectura
Por: Víctor Barojas.
En la mañana del 21 de septiembre, tomo posesión el Pbro. Mario Membrillo en la Parroquia de la Purísima en la colonia Santa Aztahuacán. La celebración fue presidida por +S.E. Don Jorge Cuapio Bautista, Obispo de la Diócesis de Iztapalapa.

En el marco del Evangelio del XXV Domingo del Tiempo Ordinario, el Obispo de Iztapalapa reflexionó sobre la administración de los bienes que Dios concede al hombre. Durante su homilía, recordó que todo lo creado pertenece a Dios, pues Él es el autor de la vida, y que nosotros solo somos administradores de lo que se nos confía.

Más adelante, el Pbro. Daniel Cordero, Canciller de la Diócesis de Iztapalapa, hizo lectura al nombramiento del Pbro. Mario Membrillo como administrador parroquial en la Parroquia de la Purísima Concepción, mencionando todas las responsabilidades como párroco.

Posteriormente, el Pbro. Mario Membrillo realizo la profesión de fe que va enseñar en la comunidad en la Parroquia de la Purísima Concepción, comprometiéndose con los Santos Evangelios con sus responsabilidades que le han mandado. El Pbro. Javier Sánchez Benítez, Obispo revistió al Nuevo párroco de la comunidad.

Posteriormente, se realizó la Procesión a los diversos lugares celebrativos de la Iglesia parroquial, sobretodo en los que litúrgicamente se celebran los sacramentos de la fe, significando la encomienda pastoral.
Sede presidencial: Es el lugar que ocupa el que preside la celebración y uno de los lugares desde el cual se predica, es decir, se enseña al pueblo congregado, la forma en que Cristo invita a vivir , este lugar es ocupado por el Párroco, que es el encargado de la cura de almas en esta comunidad parroquial.

El altar: es signo de Cristo, los padres de la Iglesia no duraron en afirmar que Cristo mismo y al mismo tiempo fue Sacerdote, víctima y altar. Por ello es venerado en toda celebración litúrgica.

La Capilla del Santísimo Sacramento: Este es el corazón de la parroquia, porque es allí donde se encuentra Cristo mismo presente en el sacramento eucarístico, Lugar al cual todos al entrar nos tendríamos que dirigir primero, sobre todo para hacer oración, de este dialogo surge la fuerza para los católicos.

El bautisterio: La pila bautismal es el lugar donde se realiza el signo que nos hace pertenecer al Cuerpo Místico de Cristo, miembros de la Iglesia, hermanos de Cristo y templos de Espíritu Santo, es donde se nace la vida de gracia.

La sede confesional: Es donde se dispensa la misericordia de Dios. La Reconciliación es el Sacramento donde la conversión y el arrepentimiento de los fieles manifestados en la confesión de sus pecados piden el perdón de Dios; por su parte en la persona del Sacerdote se expresa el amor misericordioso que tiene Dios para todos.

Las llaves de la Iglesia (En la entrada de la Iglesia): El párroco recibe las llaves de la puerta de la Iglesia parroquial, la puerta nos recuerda que Cristo mismo se pone como la puerta del redil, Cristo el Señor es la puerta que nos da acceso al Reino de los cielos, cada vez que atravesamos su umbral, recordamos que entramos para encontrarnos con Él y con los hermanos, como una familia en la casa del Padre.

El Campanario: Las campanas son convocadas para convocar a los fieles a la asamblea celebrativa, desde el antiguo el sonido de las campanas se ha interpretado como el signo del llamado de Dios.

Al final de la celebración, en nombre de la Cofraternidad de los Operarios del Reino de Cristo, el director regional en México, José Carlos Collado Paz, le dio la bienvenida y recordó con gratitud al Pbro. Víctor, fallecido el año pasado. Asimismo, expresó su agradecimiento a Monseñor Jorge Cuapio Bautista, Obispo de Iztapalapa, por abrir las puertas de la diócesis a su congregación.

Visiblemente emocionado, el Pbro. Mario agradeció a la comunidad por la cálida acogida y elevó su gratitud a Dios por llamarlo a esta nueva misión, aun reconociendo sus propias limitaciones.





Comentarios